Según informó el Diario del Alto Aragón el pasado 2 de agosto, el Ayuntamiento de Barbastro ha adjudicado a la empresa barbastrense Consdimaco la primera fase de las obras de restauración y recuperación del edificio "El Moliné", con inversión de 202.092,70 euros y plazo de ejecución de seis meses a partir de la firma del acta de replanteo. La fecha casi coincide con la del incendio provocado el 13 de julio de 2005 que destruyó el trabajo realizado desde septiembre de 1997 para recuperar la antigua Fábrica de Harinas "La Verense" y convertirla en Museo del Trigo y Casa de los Oficios.
La noticia es la siguiente:
El "proyecto ambicioso" redactado por Francisco Sánchez y Roberto Sagarra tendrá una inversión de 860.075,04 euros, y en la primera fase cuenta con subvención de 60.000 euros, de la Diputación Provincial de Huesca, y una aportación de 240.000 euros gracias al convenio de colaboración con Caja Inmaculada. Antonio Cosculluela, alcalde de Barbastro, y Luis Sánchez, presidente de la Comisión de Urbanismo, informaron sobre la actuación prevista en una rueda de prensa.
La adjudicación a Consdimaco se ha realizado mediante un procedimiento negociado, con una baja del 14,31% sobre el precio de salida respecto a las cinco empresas restantes de la ciudad a las que invitó el Ayuntamiento de Barbastro.
La primera fase incluye el andamiaje en el perímetro del edificio, tareas de desescombro interior, vaciado del inmueble desde cubierta hasta planta baja y recuperación de materiales posibles.
Se realizarán catas y ensayos para comprobar el grado de afección de fábricas y elementos resistentes y después de las tareas de saneamiento y limpieza general se procederá a la restauración estructural de forjados en cubierta y fachadas del edificio. El proyecto se ha renovado en contenidos y distribuciones interiores y destaca la creación del espacio abierto central, con visuales desde la planta baja al tejado.
Centro Cultural
Una vez conseguida la consolidación de estructuras y la rehabilitación de fachadas se realizarán dos fases de obras para completar la equipación como centro cultural con el acondicionamiento interior de las instalaciones y desarrollo del proyecto museográfico. La ejecución del proyecto y acondicionamiento del edificio original, con cuatrocientos metros cuadrados de superficie útil, tiene como objetivo el Centro de Interpretación del proceso de la molienda del trigo.
Se dispone de la maquinaria de la antigua Farinera Costa, donada gratis por el Ayuntamiento de Vic, de similares características a la que se destruyó en el incendio. En abril de 2009 el equipo técnico dirigido por Carlos Mozas desmontó todo el utillaje para trasladarlo a Barbastro, donde se conserva. La donación fue posible gracias a la colaboración de Xavier Solá i Cabanas, regidor de Cultura del Ayuntamiento de Vic y Emili Bayón, director del Museu de l" Art de la Piel, según explicó José Ignacio Alcalde, presidente del Centro de Estudios del Somontano.
Pilar Español, directora del campo de trabajo que realizó la restauración de la maquinaria original, señala: "Lo que pasó ya no tiene remedio y ahora se intentará hacer un espacio expositivo totalmente educativo y estamos muy ilusionados en recuperar la constancia histórica del proceso. De la maquinaria afectada se pueden aprovechar los molinos y algunos ejes". La posibilidad de conseguir el utillaje permitirá el montaje de una línea de fabricación bastante completa porque son muy similares.
En el edificio anexo se ubicará el Centro de Estudios y Recursos de la Memoria de las Migraciones de Aragón, que ocupará un total de 547 metros cuadrados y será un espacio donde se recojan recursos, documentación e información relativa a las memoria de las migraciones en su dimensión económica, demográfica, política y social, con el objetivo de su difusión y del estudio científico.
Caso Archivado
A raíz del incendio del edificio, se abrió una investigación gracias a la cual se descubrió que fue provocado, al descubrirse los restos del sistema utilizado.
El Ayuntamiento de Barbastro se personó en la causa abierta que se archivó después de largo tiempo, y la empresa aseguradora indemnizó con un montante de 500.000 euros, ingresados "en la caja común" de la que, previsiblemente, saldrán nuevas aportaciones para el desarrollo del proyecto, según explicó Antonio Cosculluela.
No hay comentarios:
Publicar un comentario